martes, 12 de febrero de 2008

No es país para viejos

El fin de semana pasado, junto con mi compañero de piso y un amigo de la universidad, fui a ver la película "No es país para viejos" de los hermanos Cohen, quiénes se hicieron famosos luego de su éxito "Fargo." La película es excelente, con actuaciones brillantes, dialogos muy buenos, pero con un final muy controvertido, que para algunos es pésimo. Sin entrar en detalles, valoraré las actuación más impactante de toda la película, la de Javier Bardem.

Bardem, en su papel, no es el prototipo de psicopáta que los norteamericanos han tipificado en el DSM IV como persona con trastorno de la personalidad antisocial. Es increíble, pero no sé si valorar la actuación de Bardem como brillante o muy mala. No creo que en el mundo exista sujetos como Anton Chirguth (Bardem), pues es la personificación del mal. No tiene remordimientos, ni disfruta haciendo lo que hace, tampoco hay lógica en su manera de actuar, y sin embargo sigue un método y tiene principios. Es un robot maldito que mata y no siente emoción. Tampoco es encantador, ni simpático, ni seductor, ni trata de emular conducta a fin de disimular su falta de sentimientos (buenos o malos).

La película al final deja muchos cabos sueltos y es incoherente, pero no es para nada aburrida. Es demasiado violenta, no tiene música, por lo que el público carece de pautas que el guíen al observar la película y es visualmente muy estimulante, sobre todo esas imagenes del desierto. Ahora bien, lo más notorio, sin lugar a dudas es la actuación del actor español, que cada vez que aparece en escena te produce ansiedad. No obstante, no sé si Anton representa a un ser humano o un alienigena o una especie de deidad, pues su falta total de humanidad me parece tan sobrenatural que resulta imposible.

2 comentarios:

Terzio dijo...

Es que a lo peor se parece el actor al personaje...bastante. Un progre post-marxista que se rinde al ídolo de Hollywood y se convierte al american way of life en los USA mientras en España capitanea a la piara de la cultura zpera, tiene que ser relativamente semejante a ese bestia embrutecido de la peli de los Cohen.

Desde hace unos años, la peor España se prostituye en los EEUU por una peli, y aquí, entre subvención y subvención, le hacen campaña a la piara de la siniestra. Por eso cuando interpretan papeles de degenerados, les salen muy bien: Es lo suyo.

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Tony79x dijo...

Disculpa que no te había respondido, pero la verdad es que estoy plenamente de acuerdo con tu post. Es como Courtney Love, que ganó varios premios por interpretar a una actriz porno junkie en la película "the people vs. Larry Flint" Courtney era la esposa de Cobain, el líder de la banda de rock alternativo Nirvana.