martes, 7 de agosto de 2007

El peligro de la ostentación

Hola, no me he conectado mucho recientemente, pues he estado en el proceso de "catching up" con todas mis amistades, enterándome de los últimos chismes, próximas bodas y viendo televisión, la buena vida. En cuanto a cine, ya ví los Simpson, Die hard 4 y Transformers, aunque me quedan muchas otras por ver.

Ahora que vivo en España, se me había olvidado un poco como es la televisión norteamericana. Pues en España, la televisión es muy repetitiva, si no es programa del corazón (Hay que destacar a Ana Rosa Quintana, esa niña, que con sólo 18 añitos a podido calar tan profundo en la televisión española, todo un prodigio de la ciencia de la médicina), es una guarrada o un partido de futbol. En fin, la falta de variedad te lleva a un aburrimiento extremo, que a su vez produce un aletargamiento intenso de esos que para levantarte del mueble donde estas reclinado hace falta la fuerza mil hércules para salir de la postración. En cambio, la televisión estadounidense esta llena de programas ingeniosos, alguno de los cuales han sido llevados a europa con mucho éxito. En US and A (como diría Borat) hay programas tan fantásticos como "Pimp my ride" (Chuleame el coche) "It is good to be" (Es bueno ser) "Girls at the Playboy Mansion" (Chicas de la mansión playboy) "The surreal life" (La vida surreal) "The simple life" (La vida simple de Nicole Richie y Paris Hilton), "Dr. 90210" entre otros shows muy educativos donde se enfatiza sobre todo el "buen gusto".

Al observar estos programas desde una óptica diferente producto de mi estadía en Europa, he encontrado que a los gringos les encanta ostentar riqueza. Su cultura esta basada en la ostentación como propósito fundamental, no en la acumulación de bienes materiales. Se comportan como nuevos ricos, les agrada el "Bling bling" (Slang en ebonics que significa utilizar joyas grandes de mal gusto como cadenas, relojes y dientes postizos de oro y diamantes, el uso de cetros entre otros artículos), las extravagancias como el mimo excesivo a las mascotas (artículos de Prada y Hermes para perros, masajistas y terapeutas para animales entre otros), gastronomía rídicula, y hablar francés con gesticulaciones exageradas como si estuvieran a punto de vomitar. En fin, les encanta ser el centro de la atención, ser famosos y vivir una vida de derroche y disoluta. Si no fuera así, entonces no habría tantos programas que se dedican a investigar cómo viven los famosos, cuales son los mimos y atenciones que reciben, cuales son los artículos más excentricos que han recientemente adquirido (lo último es adquirir niños huerfanos, ¿Sino como diablos puedes usar la pañalera de Louis Vuitton? Bueno puede ser para el Chihuaha), en resumen, en que gastan el dinero que tienen.

Lo que no saben estos genios de la publicidad personal es que toda esta ostentación es un arma de doble filo. La ostentación de la riqueza en un mundo injusto como el que nos ha tocado vivir solo engendra envidia. Vemos esos programas para soñar que algún día, les arrebataremos esos bienes que injustamente han adquirido por ser una cara bonita o por cantar canciones llenas de estupideces. Aquellos que nos ganamos la vida trabajando o que nos dedicamos a estudiar, por lo general, encontramos que nuestras actividades están mal remuneradas y que actrices, actores, amantes y cantantes, deportistas analfabetos, famosos por accidente o por ser empresarios atrevidos quebrantadores de la ley deberían al menos no estregarnos en la cara nuestras incapacidad para generar los dólares que ellos producen. Ay Robespierre! ¿dónde estás cuándo uno realmente te necesita?

Afortunadamente, hay un poco de justicia en este mundo ya que los mismas estaciones que emiten estos programas también producen shows donde se dedican a divulgar todas las desgracias que los "ricos y famosos" padecen. No hay nada más entretenido que ver, como una de estas "celebridades" va a la cárcel, tiene que entrar a clinicas de desintoxicación por drogas, se suicidan o se ponen simplemente obesas o envejecen. Hay una fascinación actual por los ídolos caídos, aquellos que alguna vez fueron ricos y famosos y que en la actualidad viven en la miseria o han sido olvidados por las legiones de fans que tenían. Mucha gente se pregunta ¿Por qué?, a mi me parece que la pregunta sobra, pues estas celebridades se han dedicado a sembrar envidia, y simplemente están cosechando lo que han sembrado. Si me disculpan, los debo dejar, va empezar mi nuevo show favorito, "The Soup."

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Diablos humberto no me habias informado de tu nuevo blogs. Tenias que coger para aca para decirnoslo, y ese viaje Francia tan fuera de lo comun. Esta bueno, pero escribes mucho!

Kirsys.
Besos

Tumbaíto dijo...

Eres un rojo.

Tony79x dijo...

No soy un consumidor mas de TV Basura, como todo buen ciudadano en un pais capitalista