martes, 12 de junio de 2007

Sobre la regla del 50%

Hola a todos mis futuros lectores, este es mi primera entrada al facinante mundo del blog en Español. Tengo otro en inglés que también es de reciente creación en otro servidor. Siempre había albergado la idea de escribir en Español, la lengua en que según el Rey Carlos V "es el idioma para hablar con Dios" pero no fue hasta que un amigo, Fidel, me insistió en la idea de empezar este blog. Pienso escribir sobre la vida, lo que pienso de ella y sobre las cosas banales que le dan un puntito de sal a esta insípida existencia. Lo cierto es que padezco del mal del perfeccionismo, algo contra lo que estoy condenado a luchar toda la vida, por eso todo lo que escribo lo borro y lo tacho como inservible. Recuerden este principio: lo bueno es enemigo de lo perfecto. Por lo tanto, no espero expresar ideas perfectas, escritas en el mejor castellano, me conformo con simplemente expresarme.

La primera regla de las cuales les voy a comentar es sobre la regla del 50%. Cuando se manejan estadísticas de cualquier índole y se sugiere que la ocurrencia de cualquier evento es técnicamente imposible, siempre pienso en esta regla mental que yo pensaba haber descubierto. Se llama la regla del 50%, si el evento al que se hace referencia es de naturaleza funesta, todos tendemos a pensar que nos podríamos encontrar dentro del grupo de desafortunados a los cuales el evento casi imposible luce muy posible. Por ejemplo, si te dicen que la probabilidad de que te caiga un rayo es de una en un millón, simpre, no sé porqué, uno agacha ligeramente la cabeza y mira por breves instantes al cielo. Como si la probabilidad no fuese una en un millón sino un 50% por ciento, cara o cruz. ¿Por qué somos tan negativos? La ley del 50% sugiere que en nuestra cabeza ante una situación dicótoma la alternativa más negativa tendemos a valorarla más. Esto, no es una idea novedosa, es algo por lo que un economista y un psicólogo recibieron el premio Nobel. Si, por muy loco que parezca, Kahneman y el fenecido Tversky (Vernon Smith fue el otro receptor, Tversky murió antes de que concediera el Nobel) concibieron lo que se conoce como "Prospect Theory." Estos economistas argumentan que los individuos tienden a valorar las pérdidas de una manera distinta a las ganancias en situaciones de riesgo. Esto se conoce como aversión a la pérdida "loss aversion" y entra en contradicción con al teoría estándar de la utilidad esperada, la cual supone la racionalidad del individuo y la coherencia de sus preferencias. En términos sencillos las personas tienden a supravalorar eventos poco probables y a infravalorar aquellos que son mediana o altamente probables. Uno siempre debe tener en cuenta esta tendencia natural a la hora de tomar decisiones y no dejar que estos sesgos en la evaluación del riesgo arruinen su futura decisión.

Ya saben, si alguna vez, tienen una idea que le luce muy estupida en la cabeza y hasta se ríen de ella, no la desdeñen, y escribanla en un blog de notas. Quizás sean candidatos a un futuro Nobel. (o al menos para un igNobel)

5 comentarios:

Tumbaíto dijo...

Yo creo que esa regla es consecuencia de esta otra:

NO VALORAMOS LO QUE TENEMOS

Supongamos un conjunto c -el conjunto que abarca a los mundos posibles hasta donde más mal que bien se puede vivir-. Pues bien, ahí se desarrolla nuestra vida.

De las dos posibilidades -que te caiga un rayo o que no te caiga un rayo- la segunda, pertenece al cúmulo de las cosas que tenemos -o sea, a c-. De ahí que no la valoremos.

Tony79x dijo...

Muchas gracias Fidel, ya he enviado algunos emails para que mis amigos visiten mi blog. Vaya, no se si no valoramos lo que tenemos o lo valoramos demasiado tanto así que ante una mínima posiblidad de perderlo actuamos como si tuvieramos pánico.

Anónimo dijo...

que hay humberle, que loco ta tu blog. lo leere a menudo. cuando pones la foto pa verte?

Sheila

Tumbaíto dijo...

Toma esto:

Primero, información sobre aquel republicano del que ta hablé:

Sr. Ron Paul

Y, aquí tienes el estudio de teoría de juegos del que también te hablé: NASH Y VON NEUMANN: MUNDOS POSIBLES Y JUEGOS DEL LENGUAJE

aucel dijo...

Felicidades por tu nuevo blog, Humberto! Lo iré siguiendo y comentando. No dudes en preguntarme opinión cuando te apetezca.
Te invito a que leas también el mío y lo comentes cuanto quieras.

En cuanto a lo que dices en tu entrada sobre ganancias y pérdidas, y cómo la mente las interpreta, hace poco leí algo al respecto. Es curioso lo poco objetivamente que actúa la mente ante situaciones como los premios/castigos o ganancias/pérdidas.

Como concluye E. Punset en alguna de sus entrevistas: "el hombre no busca la verdad, sino sobrevivir".

Por supuesto, léase el hombre común, no el científico.